Cori Gauff y Chun Hsin Tseng se coronaron campeones de
individuales de Roland-Garros junior.
Cori Gauff, con 14 años, el participante más joven en el
sorteo de singles, superó un comienzo con muchos nervios contra Caty McNally, de 16 años,
para ganar una final de chicas americanas que tuvo quince quiebres de
servicio, 1-6, 6-3, 7-6 (1) .
"Estoy muy emocionado y feliz, porque esta es mi
primera vez y este es mi primer cuadro principal Roland-Garros", dijo
Gauff, que había lanzado su raqueta al aire antes de caer sobre la arcilla
después de asegurar su primer título de Grand Slam. .
"Así que es realmente emocionante estar jugando
aquí", dijo. "Fue una pelea difícil, pero al final valió la
pena".
Gauff se convierte en la quinta campeona de singles
femeninas de Estados Unidos en las últimas siete majors, una racha de éxitos
que no se ha visto desde 1980-81. Ella es la novena campeona junior
estadounidense de individuales, niño o niña, desde 2015, según la Asociación de
Tenis de Estados Unidos.
Temprano en el día, Tseng, de Chinese Taipei, derrotó al
sembrado principal Sebastian Baez de Argentina, 7-6 (7), 6-2 para hacerse con el
título masculino de Roland-Garros.
Comienzo con nervios
En la final femenina, parecía que McNally estaba en el
camino hacia una victoria rápida después de ganar el primer set en 25 minutos,
y comenzó el segundo con un descanso en el servicio cuando Gauff, abatida, dejó
caer su raqueta sobre la arcilla.
Pero Gauff, quien al igual que Tseng entrena en la academia
de Patrick Mouratoglou, el entrenador de mucho tiempo de Serena Williams,
organizó una lucha impresionante.
Gauff, que había estado jugando en su segunda final de Grand
Slam después de perder ante Amanda Anisimova en la final del US Open, se llevó
el segundo set en 42 minutos cuando finalmente encontró su rango.
McNally, quien había liderado por 3-0 en el decisivo y había
servido para el partido en 5-4, no pudo terminar el trabajo mientras Gauff
luchaba para finalmente llevarse el partido en el tie-break en su tercer punto
de partido con una volea de derecha.
"Solo me decía a mí mismo que mantuviera la calma, y
puedo hacer esto", dijo Gauff. "La noche anterior, mi primo me
envió un mensaje de texto, y ella dijo: Pase lo que pase, solo di la calma y
recuerda que puedes ganar. Así que seguí pensando en eso ".
Su experiencia en Nueva York la había ayudado en París
durante su segunda final de Grand Slam.
"Recuerdo que estaba nerviosa en el US Open, donde no
podía jugar realmente", dijo Gauff. "Así que traté de no permitirme
llegar allí, aunque estaba nervioso".
Tseng, quien comparte un cumpleaños con Roger Federer, ahora
también tiene algo en común con el ganador de 20 singles en singles: un título
de Grand Slam junior.
"Me siento muy feliz y emocionado", dijo Tseng,
que había perdido en la final del Abierto de Australia en enero ante Sebastian
Korda de los EE. UU.
Al igual que Gauff, Tseng tuvo un comienzo nervioso en su
segunda final de Grand Slam esta temporada, perdiendo 3-1 en el primer set ante
Baez, el recién coronado n. ° 1 junior.
"Primero, estuve un poco apretado al principio, y
después simplemente disfruto y me relajo", dijo Tseng. "Así que
después, vuelvo".
Tseng obtuvo su primer
punto de partido por un error de su oponente mientras servía con 5-2. Después
de tomar el partido en una volea de revés, Tseng celebró con su equipo, que
incluía a su padre y Mouratoglou.
Tseng, que ha estado practicando en la Academia de Tenis
Mouratoglou, recibió un largo abrazo del francés después.
"Me ha estado apoyando durante muchos años", dijo
Tseng sobre Mouratoglou. "Él quiere que juegue agresivamente en la línea
de fondo". Hoy estaba jugando muy bien en la línea de fondo y sólido
".
Tseng una jóven estrella
Tseng, que cumple 17 años en agosto, es una de las estrellas
jóvenes más prometedoras de Asia. En abril, ganó un torneo en el circuito
Futures de menor nivel en Vietnam con 38 grados de temperatura y alta
humedad, dijo en una entrevista a principios de la semana.
Tseng, que aprendió a jugar al tenis cuando tenía cinco años
en Taipei Chino después su padre lo llevó a entrenar y competir sobre todo entrenando en en
arcilla, su superficie preferida.
Competir en Roland-Garros el año pasado, donde perdió en la
tercera ronda, lo ayudó en la final.
"Fue realmente una muy buena experiencia el año pasado,
así que este año puedo estar más cómodo en Roland-Garros", dijo Tseng.
