El español intentará batir a Novak Djokovic, nueve veces
campeón del Abierto de Australia
Roberto Carballés Baena estaba entrenando en la John Cain
Arena el jueves por la tarde con el italiano Jannik Sinner. En un descanso
antes de jugar un set, el español revisó su móvil en la que se enteró de lo que
le esperaba en Melbourne.
El español recibió un mensaje de Twitter que lo avisaba que sería el rival del nueve veces campeón Novak Djokovic en primera ronda del Abierto de Australia.
“Por supuesto que es algo que cuando vi el cuadro, fue duro”, señaló Carballés a ATPTour.com. “Pero, por otro lado, es una buena experiencia para mí. Creo que la Rod Laver Arena es una de las mejores pistas del mundo, así que intentaré disfrutar, intentaré darlo todo y hacer un buen partido”.
Más allá de la noticia, no es la primera vez que Carballés Baena se mide a Djokovic en un Grand Slam. El serbio ya lo derrotó en la primera ronda del US Open 2019 por 6-4, 6-1, 6-4.
“En los primeros cinco o diez minutos estaba bastante nervioso. Fue muy diferente. Fue como una película. Es como si hubiese una claqueta y tienes que empezar a jugar. Pero cinco o diez minutos después empiezas a centrarte en tu juego, intentas dar tu mejor tenis”, recordó Carballés Baena sobre aquel partido.
“Creo que quizás lo conozco un poco más que la primera vez”, continuó. “Lo había visto muchas veces en televisión, pero no había jugado contra él antes. Sé que es muy bueno en todo, pero creo que tengo una idea de cómo jugar”.
Y es que el español se ha convertido en un compañero de entrenamientos habitual para Djokovic, cuando el antiguo No. 1 del mundo está en Marbella, a una hora en coche de la casa de Carballés.
“Para mí es genial. Es algo muy bueno. Intento jugar con los mejores y él probablemente es uno de los mejores de la historia”, añadió Carballés. “Intentas aprender de sus tiros, que son muy limpios. Juega muy bien desde todos lados. Saca muy bien, resta increíble, tiene buen revés, así que es muy, muy bueno en todo”.
El No. 75 del Pepperstone ATP Rankings también sabe que sentirse cómodo entrenando con Djokovic es distinto a hacerlo en un partido. Los mejores son capaces de elevar su nivel en el calor de la competición.
“Es diferente. Los nervios antes del partido, cuando empiezas tienes que estar muy, muy centrado y en los entrenamientos es diferente”, indicó Carballés. “Tienes que intentar aprender cada día, intentar cosas diferentes. Pero cuando empiezas un partido en un torneo como este estás un poco más nervioso e intentas dar tu mejor versión”.
A sus 29 años, el andaluz nacido en Tenerife intentará aprovechar el momento. Es un partido del perfil de los que soñaba con jugar cuando empezó a jugar con solo dos años.
Su padre, Pío, no venía del tenis. Pero cuando vivió en Londres, empezó a jugar mucho y se mudó a Tenerife durante dos años. Ahí, Pío optó por centrarse en el tenis, pero nunca se hizo profesional. No obstante, el deporte se convirtió en parte de su vida. Y Carballés transmitió su amor por el tenis a Roberto.
“Después de eso empecé a dar clases y a jugar con algunos niños”, recordó el pequeño de la familia. “Me gustaba mucho. Quería jugar todo el tiempo. Iba al colegio y luego al club, donde me quedaba durante toda la tarde”.
Su pasión se mantiene hoy en día. Según su compatriota Alejandro Davidovich Fokina, con quien ganó un título ATP Tour de dobles en 2020, su dedicación se demuestra dentro y fuera de la pista.
“Lo conozco muy bien desde hace muchos años, quizás desde 2015 o 2016. Una de las cosas que tiene es que es muy humilde siempre”, advirtió Davidovich. “Pelea mucho en la pista y siempre quiere hacer más, quiere mejorar todo el tiempo que entrena, juega en un partido o está en el gimnasio. Es un luchador”.
Carballés Baena, aquel niño que esperaba a que acabaran las clases del colegio para ir a jugar al tenis, tiene otra oportunidad de competir en uno de los grandes escenarios del deporte. Jugará ante Djokovic el martes por la tarde en la Rod Laver Arena. La primera vez que pisó la pista central de Melbourne fue tras conocerse el sorteo.
“Creo que es algo diferente”, apuntó Carballés. “La Arthur Ashe era enorme. Cuando sales a la pista, la ves y es muy, muy grande. Esta, no sé, es un poco diferente”, matizó sobre el lugar donde se enfrentará al serbio.
“Es un partido especial… Intentaré dar mi mejor tenis y tener alguna oportunidad”, cerró.