Las sensaciones se mezclan. Llegar a unos cuartos de final de Grand Slam es una cota que Alejandro Davidovich Fokina soñaba con alcanzar algún día y lo hizo a los 22 años en esta misma edición de Roland Garros, sin embargo, este martes se despidió de su aventura en París frente a Alexander Zverev (6-4, 6-1, 6-1), con una espina clavada y una promesa.
“Estar en cuartos de Roland Garros ha sido un sueño hecho realidad, lo veía todos los años en televisión y he podido disputarlos”, reconoció el español, después de caer ante el No. 6 del FedEx ATP Rankings en una hora y 36 minutos. “Han sido dos semanas bastantes duras, con partidos muy intensos, con muchas emociones y eso es lo que me llevo al saco, que también me va a venir bastante bien para el futuro. Estoy muy contento con el torneo que he hecho, por todas las cosas que he superado”.
Mikhail Kukushkin (primera ronda), Botic Van De Zandschulp (segunda ronda), Casper Ruud (tercera ronda) y Federico Delbonis (cuarta ronda) fueron los peldaños que superó para presentare en sus primeros cuartos de final de un Grand Slam. Para llegar más lejos que nunca en un torneo de esta categoría necesitó un total de 13 horas y 10 minutos, una carga por la que tuvo que pagar un duro peaje.