El griego conquista su tercer título ATP Masters 1000 en el
Principado
Las tradiciones envuelven cada rincón del Rolex Monte-Carlo Masters y las victorias de Stefanos Tsitsipas se están convirtiendo en una de ellas. El griego conquistó este domingo su tercera corona del Principado, subrayando su figura como uno de los grandes dominadores recientes del ATP Masters 1000 monegasco. Con el Mediterráneo como telón de fondo y el calor primaveral acompañando cada golpe, el talento sobre arcilla del heleno volvió a marcar la pauta en un evento histórico como pocos.
Stefanos reconoció el camino hacia la copa al derribar uno
de los muros más altos, batiendo por 6-1, 6-4 al noruego Casper Ruud,
consolidado como gran perfil sobre polvo de ladrillo. El vigente campeón de
Roland Garros se vio desbordado por la versatilidad del griego, capaz de
dominar el tempo del partido desde el nacimiento de la final. La contundencia
de su derecha, una amplia variedad al servicio y el apoyo de un juego de
piernas excepcional hicieron del ateniense un coloso imposible de frenar en
Montecarlo.
En un torneo de gran peso en la historia, Tsitsipas grabó su
nombre entre los grandes campeones del Monte-Carlo Country Club. El griego se
convirtió en el quinto jugador capaz de levantar al menos tres copas
individuales en la arcilla de Montecarlo, uniéndose al español Rafael Nadal
(2005-12, 2016-18), al sueco Bjorn Borg (1977, 79-80), al austriaco Thomas
Muster (1992, 95-96) y al rumano Ilie Nastase (1971-73).
"Ha sido muy complicado. Volver a los podios y ganar
torneos es algo impresionante", dijo Tsitsipas. "Tengo que dar las
gracias a mi familia y amigos, también a Dios si está por ahí, por hacer
posible este momento. Estoy muy agradecido a todas las personas que forman
parte de este viaje. La tercera vez es incluso más especial que la primera o la
segunda. Es una victoria increíble para mí. Lograr la victoria ha sido muy
tenso. Quería este triplete. Me siento inmensamente feliz".
La Court Rainier III no recibió un partido cualquiera. Sobre la arcilla se dieron cita los dos jugadores con más partidos ganados en la superficie desde 2020, dejando un aroma de control desde la bocana de vestuarios. Por encima de la tarima, la gestión de la oportunidad parecía la gran cuestión a ambos lados de la red. Con el regreso garantizado al Top 10, Stefanos buscaba levantar un ATP Masters 1000 dos años después. Con una hilera de grandes finales perdidas a su espalda, Casper anhelaba su gran momento en un escenario noble.
El peso de los grandes partidos pudo afectar a Ruud en el
inicio de la batalla, donde fue incapaz de mantener el duro ritmo de pelota
planteado por Tsitsipas. El griego se mostró confiado desde la devolución,
volviendo a manejar con maestría el tempo desde la línea de fondo. Aunque el
noruego pudo escribir un set diferente, llegando a tener tres pelotas de rotura
para equilibrar el 2-2, no encontró la precisión en sus golpes. Con una
posición adelantada Stefanos logró un control total en el primer parcial,
arrebatando tres turnos de servicio consecutivos a Casper para abrir en canal
el partido. Una doble falta de Casper puso el punto final a una manga envuelta
en nervios.
El tiempo hizo aterrizar a Ruud en el partido, cuya derecha
comenzó a equilibrar la batalla. El noruego amenazó con girar el guión del
encuentro, generando opciones de rotura en los dos primeros turnos al servicio
de Stefanos. El griego, que anuló las ocho opciones encaradas en el partido,
mostró una frialdad sensacional para abordar el peligro. El séptimo juego del
parcial, una tortura en la que salvó tres break points pese a dominar 40/0 fue
la muestra definitiva de su dureza. Ni siquiera un globo entre las piernas de
Ruud que provocó su remate fallido desvió la concentración de Stefanos, que
terminaría sellando su gloria desde la devolución.
"Tenía que salir y mostrar mi tenis como había prometido [a mi equipo]. Tenía que aprovechar al máximo la oportunidad", dijo Tsitsipas, que ya acumula 11 trofeos en el ATP Tour. "Me satisface haber desplegado un tenis implacable. Desde el principio hasta el final mi juego ha tenido cuerpo y fui capaz de combinar muchos golpes diferentes".
El triunfo de Tsitsipas representa su vuelta a la primera
línea del circuito por la puerta grande. El de Atenas regresará este lunes al
Top 10 mundial como No. 7 del PIF ATP Rankings, reconvertido en uno de los
grandes aspirantes a derribar la puerta en los majors esta temporada.
A pesar de la derrota, Ruud sale de Montecarlo consolidado
como uno de los jugadores más estables de la temporada 2024. El noruego
asciende cuatro posiciones del No. 8 al No. 4 en la PIF ATP Live Race To Turin
y se mantiene pleno de ritmo en una vibrante temporada de arcilla. Con el
objetivo de seguir brillando en la superficie, Casper disputará el Barcelona
Open Banc Sabadell esta próxima semana.
¿Sabías Que…?
Stefanos Tsitsipas es el cuarto jugador en activo con al
menos tres títulos ATP Masters 1000 individuales sobre tierra batida. El
griego, tres veces campeón en Montecarlo, sigue los pasos de del español Rafael
Nadal (26), el serbio Novak Djokovic (11) y el alemán Alexander Zverev (3) en
la superficie. En la actual gira europea de tierra batida, la categoría dorada
del ATP Tour ofrecerá nuevas oportunidades en el Mutua Madrid Open y en el
Internazionali BNL d’Italia.