El bronce olímpico de Cristina Bucsa y Sara Sorribes en el
dobles femenino de tenis de París 2024 nació de una monumental casualidad.
La valenciana tenía previsto disputar el Mutua Madrid Open
2024 con su pareja habitual, Marie Bouzkova, pero los problemas físicos de su
compañera dejaban la participación en el aire. En el gimnasio de las
instalaciones, Sorribes se cruzó con el padre de Bucsa, que aún buscaba pareja.
"¿Seguís sin tener a nadie? ¿Queréis jugar?",
preguntó Sorribes. Ahí empezó una carrera contrarreloj que terminó 15 minutos
antes del cierre de inscripciones.
Bucsa y Sorribes nunca habían jugado juntas, apenas algún
peloteo distraído entrenando con la selección, pero mostraron una
compenetración sorprendente, la misma que desarmó a Karolina Muchova y Linda
Noskova en la final por el bronce olímpico.
La pareja española se impuso a las checas por un doble 6-2
en la Philippe Chatrier para ganar el bronce olímpico, la 14ª medalla para el
tenis español en unos Juegos Olímpicos (a la espera de la final de Carlos
Alcaraz) y la quinta en el dobles femenino.
El dúo Bucsa-Sorribes se une a Conchita Martínez y Arantxa
Sánchez Vicario (plata en Barcelona 1992, bronce en Atlanta 1996); Conchita
Martínez y Vivi Ruano (plata en Atenas 2004), y Anabel Medina con Vivi Ruano
(plata en Beijing 2008).