Málaga, 3 de agosto de 2025
Por Jorge Mir Mayor
El tenista debe usar patrones de juego que exploten las debilidades del rival mientras mantiene sus propios golpes seguros y consistentes.
Esto crea una especie de "imán" que atrae al rival a
zonas incómodas y aumenta las probabilidades de error.
Claros ejemplos de dos campos magnéticos diferentes son el
imán de Sinner y el imán de Alcaraz.
Sinner es un imán de estructura: te encierra en un túnel de
potencia y precisión.
Alcaraz es un imán de caos creativo: te atrae hacia su
terreno cambiante, donde tiene ventaja porque él controla la variabilidad.
Ambos atraen el juego, pero con filosofías distintas.
El reto para cualquier rival es evitar quedar atrapado en
ese “campo magnético”.
Juega donde dominas, lleva al rival donde duda.
Saludos. Jorge Mir