miércoles, 26 de enero de 2022

"La importancia y el rol de la psicología en el tenis"


La mente en el tenis y el rol de la psicología
Tener una técnica depurada o un estado físico envidiable parecen ser las claves para ser un gran tenista, pero cualquiera que haya entrado a una cancha de tenis ha podido comprobar que el factor clave es otro: la mente.

Quienes han tomado una raqueta y se han parado en una cancha de tenis, ya sea simplemente a aprender y jugar o a competir, han podido percibir rápidamente la incidencia e importancia del factor mental.

Desde un comienzo en el tenis se experimenta la dificultad que significa en primer lugar coordinar el cuerpo de tal forma que la pelota pase la malla y, además, poder mantener estos “peloteos” de forma regular, ya que el tenis es un deporte de exigencia física, donde además de una gran resistencia se requiere fuerza, agilidad y coordinación.

A estos requerimientos físicos, se suma el aspecto mental, en un deporte que se caracteriza por el irregular desempeño de quienes lo juegan. Porque a pesar de lo buena que una persona pueda ser, contando con una buena base técnica y un buen estado físico, constantemente se debe lidiar entre los aciertos y los errores. Es a pesar de esta irregularidad que se puede ganar partidos y esto es algo que a muchos jugadores y deportistas les cuesta entender.

Las características propias del tenis recién mencionadas producen en el deportista un alto nivel de frustración, por no poder controlar tal como quisiera todo lo que ocurre dentro de la cancha y esta frustración produce un alto grado de irritabilidad, que suele expresarse en raquetas lanzadas al suelo, gritos al aire y pelotazos enviados con toda la fuerza posible sin ningún otro objetivo más que poder desahogarse.

A la sensación de descontrol característica del tenis, también se suma otro aspecto bastante común, la presión. Quien haya jugado tenis, y juegue partidos con regularidad ya sea contra amigos o en competencias, entiende muy bien lo que significa estar sacando para cerrar un set, el mantener un quiebre cuando se va arriba 4-1 (que parece mucho, pero puede ser un solo quiebre) o el realizar un segundo saque cuando se tiene un punto de quiebre en contra. Estos son aspectos comunes del deporte, pero que generalmente el deportista no sabe cómo enfrentar y cae constantemente en los mismos errores.

El rol del psicólogo deportivo
Frente a situaciones de este tipo es donde entra en acción un área de especialización de la psicología que no es tan conocida o entendida: se trata de la psicología deportiva. Generalmente, cuando se piensa en psicólogos se viene a la mente alguien tomando notas en una libreta mientras uno se siente un poco incómodo en un gran sillón; y cuando se piensa en un psicólogo trabajando con deportistas, se piensa que el deportista tiene problemas, que el psicólogo debe estar ahí para “motivarlo”.

Sin embargo, la psicología deportiva difiere mucho de la percepción que suele tener la gente, pues se trabaja con los deportistas tanto para ayudarlos a mejorar el rendimiento como también para ser un punto de soporte frente a las situaciones cotidianas que pueden interferir en su conducta deportiva. El lugar de trabajo no se limita a una oficina, sino que se expande a los lugares de entrenamientos y también a los de competencias, donde el deportista realmente se muestra como tal, y donde se puede observar directamente cómo se desenvuelve en relación a las variables psicológicas que se trabajan.

Sin lugar a dudas, el tenis es un deporte donde el factor mental juega una parte muy importante, y no se puede confiar sólo en las habilidades innatas para enfrentar las situaciones que pueden afectar en un partido. Por esto es que a partir de los próximos artículos se irán explicando las situaciones del deporte y algunos consejos para enfrentarlas adecuadamente, de modo que cada uno vaya aprendiendo a trabajar este aspecto fundamental en el tenis, el factor mental.

2009-2017, "LA ÉPOCA DORADA DEL TENIS MALAGUEÑO", ¿DAVIDOVICH?. Álbum de tenistas malagueños.