Alcaraz, Ferrer, Bautista, Granollers y Martínez valoran el
adiós de su compatriota
Unos crecieron junto a él en la pista, otros pudieron
disfrutarlo como compañero durante años en el circuito —o incluso padecerlos
como rival— mientras que hay quien quiso ser tenista por su influencia. El
legado de Rafael Nadal es eterno y sus compañeros de equipo esta semana en las
Davis Cup Finals definen así lo que supone estar con él en su adiós.
“Me siento afortunado de poder vivir momentos con él en la
pista y fuera de ella”, no duda en manifestar Carlos Alcaraz sobre uno de sus
grandes ídolos de infancia. “Me hubiera encantado haber compartido muchísimos
más [momentos], seguir aprendiendo de él tanto dentro como fuera de la pista.
Me siento afortunado”.
El actual No. 3 del PIF ATP Rankings es diecisiete años más
joven que el campeón de 22 Grand Slam, pero ha tenido la oportunidad de
disputar frente a frente tres partidos en el ATP Tour y, sobre todo, compartir
el mismo lado de la pista en la modalidad de dobles en la reciente edición de
los Juegos Olímpicos de París 2024.
En el caso de David Ferrer la relación se ha prolongado
durante veinte años. Y es que el primer duelo de los 32 que registra el Lexus
ATP Head2Head entre ambos (26-6 para Nadal) se produjo en Stuttgart 2004.
“Es una suerte para todos compartir el último momento de
Rafa en una pista de tenis como amigo, compañero que lo he vivido y lo he
sufrido en la pista, confiesa el capitán español. “[Me siento] afortunado de
vivir estos momentos con alguien al que le tienes un cariño especial”.
Esa suerte y fortuna en la que insisten Alcaraz y Ferrer es un sentimiento que comparte Roberto Bautista Agut, con quien el balear estuvo entrenando la pasada semana en Mallorca antes de viajar a Málaga.
“Rafa ha sido un ejemplo para todos nosotros, hemos podido
aprender mucho de él, por suerte hemos podido compartir momentos dentro y fuera
de la pista, también como compañeros de Davis”, señala el castellonense dos
años más joven que Nadal.
“Me siento muy afortunado de estar en el equipo con él.
Seguro que tiene muchas ganas de poner su granito de arena e intentar que lo
hagamos bien en esta Copa Davis”, continúa Bautista. “Para mí que esté Rafa en
el equipo aporta mucha buena energía, competitividad, nos conecta y nos pone a
mil a todos, que esté con nosotros es muy positivo”.
Alguien que conoce bien a Nadal y que ha compartido muchas
experiencias desde la adolescencias es Marcel Granollers, el único jugador del
equipo español con el que comparte año de nacimiento (1986).
“Es muy especial tener a Rafa con nosotros en el equipo,
probablemente para mí ha sido el primer compañero en la selección nacional,
porque al ser de la misma edad jugamos cuando éramos más jóvenes y compartimos
también bonitos momentos en el equipo español entre los 14 y los 16 años”,
recuerda ahora Granollers. “Tenerlo aquí en su último torneo es muy bonito para
mí también”.
Finalmente, Pedro Martínez toma la palabra: “Yo no había
tenido la suerte de poder estar tan cerca de él, para mí haberlo visto jugar
desde pequeño y tenerlo como un ídolo, como un referente y ahora poder estar
aquí, es muy especial y va a ser muy bonito”.
Son las palabras de homenaje y agradecimiento de los cinco
hombres que arropan a Nadal en su última semana como tenista profesional.