Rafa Nadal vive con normalidad su última semana en el
circuito
Muchas veces un adiós conlleva implícito un sentimiento de tristeza y nostalgia.
En el caso de Rafael Nadal, trata de mantenerse al margen
de las emociones que rodean sus últimos días como tenista profesional esta
semana en las Davis Cup Finals y por eso, aunque asume con tranquilidad su
situación evita dibujar un escenario soñado para su final.
“No hay despedida ideal”, se apresuró a aclarar en la
conferencia de prensa del equipo español este lunes en Málaga antes de debutar
este martes frente a Países Bajos. “Los finales de película normalmente son
para las películas americanas y yo hace tiempo que me di cuenta que no tendría
una de estas, así que no es algo que me preocupe”.
El campeón de 22 Grand Slam opta por restar dramatismo y
literatura a su adiós, normalizando un proceso vital inevitable para cada
deportista. “Lo estoy viviendo de la mejor manera posible, con la normalidad
que he intentado vivir todas las cosas en los buenos y malos momentos, sin
ningún exceso de nada”.
Mientras las preguntas se dirigen prácticamente en un única dirección hacia el mismo protagonista, sus compañeros en la mesa Carlos Alcaraz, David Ferrer, Roberto Bautista, Marcel Granollers y Pedro Martí
ínez, intervinieron para elogiar la trayectoria de Nadal, como si tomaran
la palabra por unos instantes en nombre del mundo del deporte y los fans.
“Evidentemente se acaba una época para mí. Han sido muchos
años compartidos con muchos de ellos [sus compañeros] y con otros menos, pero
me pasa a mí cuando veo a algún deportista al que estoy acostumbrado a ver por
televisión cada semana, al final no deja de ser parte de tu vida”, explicó
Nadal.
“Entiendo que para mucha gente que ha crecido viéndome jugar
habitualmente se acaba una etapa, no me van a ver nunca más jugando a nivel
profesional”, prosiguió el campeón de 92 títulos ATP Tour. “Es algo que es
parte de la vida misma, que ha sucedido con todos y en este momento me toca a
mí, como era lógico”.
El antiguo No. 1 del mundo podrá despedirse, al menos, de la forma que reclamaba hace un año en una comparecencia ante los medios de comunicación: vestido de corto, siendo parte de la competición. “No merezco acabar mi carrera así, en una rueda de prensa”, dijo el pasado mayo de 2023 cuando comunicó que esta sería su última temporada como profesional.
“Al final se ha cumplido lo que dije, que lo normal es que
este fuera mi último año y así ha sido”, recordó sobre sus palabras el pasado
año en la Rafa Nadal Academy. “Pero me he querido dar la oportunidad, porque
siempre me gusta tener la certeza, no quiero quedarme con la duda de “y si no
hubiera hecho…”.
Con sólo dos torneos disputados a sus espaldas en 2023
(United Cup y Abierto de Australia), decidió pasar por quirófano para poder
colgar la raqueta haciendo lo mismo que durante casi 25 temporadas de carrera:
jugar al tenis.
“Sé que he hecho todo lo que he podido, ha llegado mi
momento y [tengo que] aceptarlo como tal, sin ningún tipo de drama para irme
con la tranquilidad personal de haber hecho siempre ese último esfuerzo que
requería la situación”, añadió. “Igual que lo he hecho muchas otras veces y me
ha salido bien, ha llegado un momento que por edad, por la acumulación de todo
y la lesión multifactorial tengo que decir hasta aquí”.
Pero a ese “hasta aquí” le queda, como mínimo, un capítulo
más este martes en cuartos de final de la Copa Davis. “Estamos aquí para
competir, todo lo demás no tiene que distraernos para lo que habíamos venido
que es intentar dar nuestro máximo para conseguir el mejor resultado posible”.
Aunque Nadal evita hablar de un escenario ideal de
despedida, si hay alguno posible ese es claro: levantar el próximo domingo su
sexta Ensaladera con España. “Sería fantástico tener a todo el equipo muy
competitivo, intentando ganar otra Copa Davis. Aparte de ser una bonita
despedida para mí, sería una gran alegría para todos”.