Chocarán el domingo desde las 19:30, hora de Melbourne
Jannik Sinner va detrás de Alexander Zverev por 2-4 en el
Lexus ATP Head2Head entre ambos.
Doce meses después, Jannik Sinner está de vuelta al escenario que lo terminó catapultando como campeón primerizo de Grand Slam. A diferencia de 2024, esta vez lo envuelve un aura de imbatibilidad —que lo tiene con 20 partidos sin perder—, y una inercia tan ganadora que el domingo entrará como gran favorito para llevarse su tercer título de esta categoría.
Lo convertiría en el primer italiano en la historia, hombre
o mujer, en ganar esa cantidad de majors en individuales, dejando atrás las dos
conquistas de Nicola Pietrangeli en Roland Garros 1959 y 1960. Sinner ganó sus
primeros dos Grand Slams en 2024: Australia y el US Open. Un trofeo el domingo
le abriría espacio en un exclusivo club de campeones.
Un triunfo No. 21 de manera consecutiva (y No. 14 en
Australia) lo vería convertirse en el tercer jugador de este siglo en ganar al
menos tres Grand Slams consecutivos sobre pistas rápidas. Igualaría al suizo
Roger Federer, quien prevaleció en cinco entre 2005 y 2007, y a Novak Djokovic,
ganador de tres eventos seguidos en este tipo de pistas entre 2011 y 2012, y
entre 2015 y 2016).
Su oposición será al mismo tiempo una especie de reflejo de
su momento hace doce meses. Alexander Zverev estará buscando su primer título
de Grand Slam, tal como Sinner en 2024 en su primera final del Abierto de
Australia.
“Hemos tenido algunos partidos muy difíciles en el pasado.
Todo puede pasar”, dijo Sinner sobre Zverev. “Es un jugador increíble. Está
buscando su primer Grand Slam. Habrá mucha tensión nuevamente, pero estoy feliz
de jugar en esta posición. Los domingos siempre son días especiales en los
torneos y lo voy a disfrutar”.
Eso sí, el alemán de 27 años jugará con el peso de haber caído en sus finales previas a este nivel: la del US Open 2020 (p. con Thiem) y la de Roland Garros 2024 (p. con Alcaraz).
Pero el No. 2 del mundo cree que cuenta ahora con lo
suficiente para que el desenlace sea distinto el domingo: el aspecto físico.
Además de que se ha potenciado en ese sentido en los últimos meses, llegará a
la final fresco de piernas y habiendo perdido solo dos sets en el camino.
Parece estar viendo los beneficios de haber contratado de vuelto al fitness
coach Jez Green.
“Esa fue la razón por la que lo contraté, para poder
competir con esos muchachos”, dijo Zverev. “Creo que lo dije también después de
la final de Roland Garros, me cansé contra Carlos. Simplemente me cansé en el
cuarto y quinto sets. Sí, hubo algunos momentos de mala suerte... Pero en
general, me cansé y no quería que eso sucediera más este año”.
Si Zverev corta su sequía, marcaría la segunda mayor
cantidad de participaciones en la Era Abierta antes de un primer título de
Grand Slam. Igualaría las 36 apariciones de Stan Wawrinka en Australia 2024 y
solo quedaría por detrás de las 48 de Goran Ivanisevic en Wimbledon 2001. Eso
sin contar con que sería el primer alemán en ganar Australia desde Boris Becker
en 1996.
La presión que supone estar tan cerca del sueño de su vida
también se une a la de enfrentar a un Sinner casi imbatible en los últimos
tiempos. Aunque Zverev lidera 4-2 el Lexus ATP HeadToHead entre ambos, el
italiano se quedó con el duelo más reciente, disputado en Cincinnati en 2024 y
que terminó en el tie-break del tercer set.
“Creo que Jannik ha sido el mejor jugador del mundo durante los últimos 12 meses”, dijo Zverev, que avanzó al partido por el campeonato tras el retiro de Novak Djokovic en semifinales. “No hay duda al respecto. Ganó dos Grand Slams. Ha sido muy, muy estable en esos aspectos. Así que definitivamente es uno de los mejores jugadores del mundo”.
Será la primera vez en seis años que la final del torneo se
dispute entre los dos máximos cabezas de serie. No sucedía desde 2019 cuando
Djokovic (No. 1) derrotó a Rafael Nadal (No. 2). Cualquiera que sea el ganador
del partido de este domingo, muchas marcas entrarán al libro de historia del
deporte.