miércoles, 8 de abril de 2020

Artículos. La ansiedad en el juego del tenis


 Cuando la ansiedad es previa al partido, la solución es aparentemente fácil, ya que, bastaría con aplicar ciertas técnicas de relajación para lograr que el jugador controle las manifestaciones de la ansiedad, ya sean estas fisiológicas (dificultad para dormir, irregularidad en la alimentación, taquicardias, etc.) motoras o cognitivas (pensamientos negativos). En muchas ocasiones cuando esto sucede, el deportista logra resolver parcial o totalmente el problema. La cuestión es… ¿Qué sucede cuando los síntomas surgen en pleno partido de tenis? ¿Es posible allí aplicar técnicas de relajación? ¿O el deportista debe esperar que por efecto azaroso ésta desaparezca?

ANSIEDAD INTRA DEPORTIVA
Cuando se esté disputando un partido y surjan ciertos síntomas de ansiedad, lo primero que hay que analizar es si esta sintomatología puede producir un verdadera merma en el rendimiento, ya que, es importante señalar que en todo deporte es necesario siempre algún grado de activación, situación que en psicología del deporte denominamos zona individual de funcionamiento óptimo (IZOF) y que, en estricto rigor, corresponde a una especie de “ansiedad controlada” y necesaria, para generar la motivación y la energía durante gran parte de una competencia. Pero si por el contrario, esta activación se descontrola y empieza a provocar dificultades en el deportista, se hace necesario que se disminuya y se controle para que el deportista pueda conseguir el “estado de flow” necesario y ejecutar el máximo de rendimiento de acuerdo a sus propias potencialidades.

Así, cuando esta “ansiedad intra deportiva” se haga presente, el jugador debiera desarrollar algunas rutinas que busquen sacarlo de ese estado y logren reubicarlo en la “zona adecuada”, sobre todo porque además, esta modalidad de ansiedad puede aparecer y desaparecer, ya que de alguna forma, está mediatizada por las sensaciones o emociones del deportista y por lo que pueda ir sucediendo en términos deportivos (rendimiento y resultado) durante el juego.

RUTINAS PARA EL CONTROL DE LA ANSIEDAD
Una de las situaciones que más genera ansiedad durante el juego, más aún en jugadores jóvenes, son los puntos clave o decisivos, como puede ser el cierre de un set, de un partido o de un punto definitorio post un juego excesivamente largo o muy estratégico (como por ejemplo ir 4-3 y con el punto instalarse con un 5-3 y adportas de quedarse con un set). En estos casos una de las situaciones iniciales que debe asegurarse, es que el jugador permanezca focalizado en la acción que está ejecutando y no centre su atención en hechos pasados (errores que pudo haber cometido) o en acciones que podrían desencadenarse en el futuro.

Una situación práctica y que suele ocurrir a menudo es que durante el partido, ante una excesiva ventaja en el marcador de un juego, el deportista pueda no cerrarlo favorablemente, desmotivándose o relajándose. También puede ocurrir la misma situación pero desde el otro punto de vista, que el jugador se encuentre abajo por un amplio marcador, y no cuente con el empuje necesario para acortar o equilibrar las cifras. Para ambos casos una rutina que puede favorecer tal cuestión es “marcador mental paralelo”, es decir, que mentalmente ese deportista sólo tenga presente el marcador más inmediato, es decir, sólo el 1-0, o bien, 0-1 según corresponda. Lo que se busca es que el tenista permanezca mentalmente preocupado sólo por el punto que a continuación se jugará. Por ello es que él debe en “su cabeza” llevar este marcador paralelo y no la cuenta global real, ya que, eso sólo podría llevarlo a generar más ansiedad o a desmotivarlo.

Otras rutinas que podrían ayudarlo en esta dirección es trabajar con la respiración. Se ha comprobado que respirar adecuadamente en estas instancias favorece mucho el control de los síntomas fisiológicos de la ansiedad (alteración cardíaca, sudoración, aumento de la presión sanguínea, entre otras…) o motores (rigidez o tensión muscular, calambres, etc.). El jugador debiera tratar de sincronizar su respiración, o bien “sacar” la respiración, es decir, botar el aire, cuando se golpea la bola.

Finalmente otro ejercicio mental que puede favorecer el control de la ansiedad durante el juego es llevar a cabo micro visualizaciones. Una visualización consiste en imaginar, sentir, percibir una situación, que no está presente, como si en realidad lo estuviera. En el caso del tenis, una visualización puede llevarse a cabo, por ejemplo, cuando el jugador se prepara para servir. Ahí puede imaginar, en fracciones de segundos, el tipo de servicio que va a ejecutar. Con ello no sólo estará preparando a su organismo para la acción, sino que además su mente estará absolutamente inmersa en la acción presente, evitando por ende, que ésta divague en cuestiones accesorias que no tienen relevancia en ese momento. Por ello el desarrollo de estas pequeñas visualizaciones durante un partido pueden ayudar al deportista a focalizarse en la ejecución del gesto técnico, y no tanto en el resultado, que normalmente también son elementos generadores de ansiedad.

La ansiedad siempre será una situación que habrá que atender, ya sea, que se produzca fuera o dentro de la cancha, porque ambas podrían redundar negativamente en la performance deportiva. Por ello es que durante años la ansiedad seguirá siendo un elemento a observar por deportistas entrenadores, profesionales y psicólogos.

 

2009-2017, "LA ÉPOCA DORADA DEL TENIS MALAGUEÑO", ¿DAVIDOVICH?. Álbum de tenistas malagueños.