domingo, 4 de noviembre de 2018

Habla uno de tantos jugadores que intentan abrirse camino en el tenis profesional y ve como las dificultades económicas le impiden desarrollar su gran pasión



Nos habla uno de tantos jugadores que intentan abrirse un camino en el deporte profesional y se encuentran con las dificultades económicas como principal obstáculo para poder desarrollar su gran pasión. En el caso de este joven de 17 años es el tenis, justamente un deporte que en su primera etapa necesita de un impulso importante de dinero para competir en torneos que den puntos para el circuito profesional.

Hoy se encuentra en un momento decisivo para su incipiente carrera que lo llevó a sumar su primer punto para el ranking en 2017. Su nombre aparece en el sitio oficial de la ATP a más de 1500 puestos de Rafael Nadal. Está 1592 con un punto en solo uno torneo. Sus sueños de crecer y hacer del tenis una carrera profesional se harán mil pedazos si no consigue un sponsor que lo ayude a financiar los viajes para jugar torneos.

La situación económica de su familia lo puso entre la espada y la pared. Hace dos años decidió dedicarse de lleno al tenis con el apoyo de sus padres, pero hoy el dinero no alcanza ni siquiera para competir dentro del país. Por eso decidió pedir ayuda a través de su cuenta de Twitter.

"Empecé a jugar al tenis a los 6 años, hace 11 años, siempre en el mismo club. Siempre les costó mucho a mis padres, y mi familia los ayudó. Desde chico jugaba los torneos que podía jugar, los más cercanos, para no gastar tanto. Pero ahora se está haciendo imposible", nos cuenta en medio del descanso de dos turnos de entrenamiento.

"Hace dos años le dije a mi padre de dedicarme al tenis de manera profesional. Él me dijo que yo tenía que hacer el esfuerzo de entrenarme fuerte y lo estoy haciendo, pero no estoy compitiendo como necesito. Lo ideal sería poder viajar a torneos Futures, que son profesionales, pero no puedo hacerlo por una cuestión económica. Necesito ayuda", agregó Santiago.

Para un tenista de 17 años no poder viajar significa estar fuera del tenis profesional. Y eso le pasa al que nos habla: "La carrera se acaba si no consigo dinero para jugar torneos. A mi edad no puedo perder tiempo. Entreno, entreno y entreno pero juego poco y estoy regalando tiempo".

"Mi padre trabaja en una fábrica y mi madre es ama de casa. También nos ayuda mi abuela y mis tíos, pero no alcanza".
Ahora, está juntando dinero para viajar y con la familia decidió vender alguna que otra cosa de casa que ya no usaba, pero solo juntamos para poder estar una de las tres semanas que dura el torneo".

"Entreno en doble turno, hago una dieta para deportistas y ahora voy a ir a un nutricionista”
El año pasado, fue número 1 en su país y sumó su primer punto para el ranking ATP. El Eligió vivir para el tenis y hoy necesita ayuda. Como tantos y tantos otros jugadores en cualquier país. Y es ahora. Porque dentro de un tiempo tal vez ya sea muy tarde.

2009-2017, "LA ÉPOCA DORADA DEL TENIS MALAGUEÑO", ¿DAVIDOVICH?. Álbum de tenistas malagueños.