Simplemente el mejor. Con dicha frase podría resumirse el estatus actual de Chung Hsin Tseng
en el circuito junior masculino. El joven jugador que compite bajo bandera de
China Taipei (calificativo que se da a la República China de Taiwan, estado de
reconocimiento limitado, ha ofrecido una auténtica exhibición de poderío
durante el 2018. A sus 17 años, Tseng ha alternado escaramuzas interesantes en
el circuito profesional, con un desarrollo notable como jugador en la categoría
que le corresponde por edad. Es uno de los tenistas más prometedores del mundo,
pero su entorno ha querido mantenerle con los pies en el suelo esta temporada,
buscando una adaptación progresiva al profesionalismo, y con el bagaje de haber
dominado en categoría junior.
Su paso por los Grand Slams Junior ha sido inolvidable;
finalista en el Open de Australia (perdió contra Sebastián Korda), campeón de
Roland Garros y Wimbledon y semifinalista en el US Open. Por si esto fuera
poco, puso la guinda a una temporada mayúscula con el título en el ITF Junior
Masters, torneo que reúne a los mejores de la temporada en dicha categoría.
Esto le ha valido para terminar como número 1 del mundo junior, y plantearse el
asalto a un circuito ATP en el que ya ha aparecido de manera esporádica este
año.
"Es increíble haber acabado en la cima del ranking
junior. Me da mucha confianza para lo que se viene ahora, ya que necesito
fortalecerme a nivel físico y mental para dar el salto a profesionales",
asevera en la web de la ITF un joven que ha emulado la hazaña de Gael Monfils
en 2004, al haber sido el segundo jugador en la historia que gana el mismo año
los Grand Slams Junior de Roland Garros y Wimbledon, transmitiendo la sensación
de saber adaptarse a las mil maravillas a todo tipo de superficies. Comparte
cumpleaños con el mismísimo Roger Federer (8 de agosto), en lo que algunos ven
una anecdótica señal de lo que puede llegar a ser en el futuro.
Además de dominar el circuito junior con puño de hierro,
Tseng sumó tres títulos ITF Futures (Vietnam F1, Portugal F9 y China Taipei
F2), que le valieron para terminar el año como 441 del mundo, y poder dar el
salto al ATP Challenger Tour. Y es que en su segundo torneo de dicha categoría,
ya cosechó un triunfo; fue ante Max Purcell, aunque luego caería frente al
austríaco Jurij Rodionov. Su debut en un torneo ATP se produjo en Chengdu,
donde se vio superado por Taylor Fritz, con un marcador de 6-3 6-2.
Buenas sensaciones de un chico que se erige en uno de los
grandes dominadores a nivel junior que ha habido en los últimos tiempos,
caracterizados por la alternancia de poder debido a una gran igualdad entre
diversos contendientes así como a que muchas de las jóvenes promesas dieron un
salto temprano al profesionalismo. Chun Hsin Tseng ha cerrado el círculo en
este 2018, y afrontará un nuevo reto la próxima temporada. Debe tener paciencia
y no ponerme demasiado presión si desea triunfar. Potencial tiene de sobra para
ello.