Un psicólogo deportivo, con experiencia en diversas
disciplinas y sobre todo especializado en tenis, le hace conocer la vivencia interna de un tenista según que momento. “Saber qué suele ocurrir en la pista y qué se siente cuando algo no esperado ocurre", ¿que hacer?. La
pasión especial por el deporte con el cual trabajas también es positivo e importante. El psicólogo
adquiere una gran ventaja cuando trabaja con el deporte que ha practicado. Por
eso, hoy en día.
A los psicólogos deportivos les llama poderosamente la atención el ver cómo cambia el juego y los resultados deportivos cuando el jugador no cumple sus propios programas mentales. Es
algo que a veces parece magia porque el desempeño puede elevarse muchísimo.
Pero no es magia, es solo la interrupción de una secuencia negativa habitual de
procesos mentales que suele perjudicar el desempeño de un jugador. Cuando esa
cadena se rompe o se sustituye por otra, afloran capacidades naturales del
tenista. Veamos un ejemplo hipotético:
El tenista llega a la pista y piensa “mira los golpes de mi adversario. Parece que siempre siente la pelota, todo lo mete y me responde a todo mis golpes, (llega a todo). Creo que voy hoy tener un mal día”.Comienzo a impacientarme. Doy los primeros golpes y veo que no estoy sintiendo la pelota, entonces se inicia la desesperación. Le pego más
duro, hago golpes más difíciles para agarrarle el swing, para ver que le pego
bien. Pero no lo logro y le pego más duro aun. Me pongo tenso, me duele el
codo y me cuesta más sentir la pelota.
Finalmente grito, el entrenador me reclama, me desmotivo y tardo 5 días en
volver a sentir la pelota”.
Algunos tenistas tienen programas como ese. Al
identificarlo, se les aconseja:
Empieza concentrado en ti, sin compararte, pegando golpes
fáciles. Y conforme vayas sintiendo un poco más la pelota, ve aumentando la
dificultad de los golpes poco a poco.
La mayor parte del trabajo consiste en enseñar al jugador a
reconocer esos programas. Algunos suelen conducir al buen desempeño y hay que
potenciarlos, mejorarlos, etc. Otros llevan al fracaso. Por eso hay que
modificarlos o eliminarlos. A lo largo de años, los psicólogos deportivos han creado técnicas
de PNL (Programación Neuro-lingüística) útiles para eso y mucho más. Estas sirven
para:
Crear un diagrama donde el tenista ve reflejado de su propio
programa mental.
Identificar y reproducir el estado mental asociado al
elevado rendimiento.
Mejorar la coordinación motora induciendo la sensación de
control sobre el cuerpo.
Acelerar el aprendizaje de nuevas técnicas que sean explicadas por el entrenador.
Acelerar el aprendizaje y puesta en práctica de las
indicaciones tácticas del entrenador relacionada con la toma de decisiones
durante los partidos.
Mejorar la capacidad del tenista para pensar, analizar y
decidir durante los partidos.
Inducir emociones positivas en el atleta y controlar el
estrés competitivo.
Ayudar al tenista a mirar y sentir bien la pelota cuando
golpea.
Al momento de evaluar a un jugador, se trabaja con una
herramienta de evaluación psicológica que se ha venido desarrollando desde hace
unos años, la cual permite representar los programas mentales del jugador de la
manera como se ve en el siguiente ejemplo: