Aunque las similitudes son muchas, también hay importantes diferencias entre ambos deportes, no sólo a nivel de pista sino también a nivel de juego y rendimiento. Por ejemplo, el tenis es exigente técnica y físicamente, requiere dominar los golpes, empuñaduras, efectos, posiciones,… Además de necesitar una resistencia física para aguantar largos peloteos en una cancha mucho más amplia que la de pádel.
El pádel es un deporte mucho más fácil de aprender. No requiere demasiada técnica y, por lo tanto, es fácil jugar desde el principio. Como la exigencia física también es menor, es una disciplina con la que, incluso cuatro principiantes de cualquier edad y condición, pueden pasar un rato muy divertido.
En sus orígenes, tenis y pádel nacieron como entretenimiento para la alta sociedad de la época… El pádel parece haber conservado mejor esa esencia para lo que fue concebido mientras que el tenis está mucho más evolucionado y profesionalizado.
Puede que ese sea uno de los principales secretos del éxito del pádel: que se sigue percibiendo como una diversión que cualquier aficionado practica y disfruta, que puede hacerlo junto a familiares y amigos y que, en definitiva, es un juego y es muy social.
No es ningún secreto que el pádel puede ser considerado como uno de los deportes de moda y está en constante crecimiento, tanto en número de pistas como torneos y popularidad. El tenis, sin embargo, pierde licencias y adeptos año tras año. En las últimas temporadas, muchos de los potenciales practicantes de tenis, se han iniciado en el pádel, hasta conseguir que, en España, el número de practicantes de pádel ya sea superior al de tenis.
Pero seamos realistas: aunque el pádel se ha convertido en España en un gigante, hay muchos jugadores que lo son por moda y de la misma forma que empiezan a jugar, dejan de hacerlo. El tenis, sin embargo, es un deporte ya consolidado desde hace muchos años en multitud de países de todo el mundo. Un deporte que se convirtió en una de las modalidades que formaron parte de los primeros Juegos Olímpicos de la Era Moderna, que tuvieron lugar en Atenas en 1896, y que ha permanecido en su programa desde entonces.
El tenis es el deporte de raqueta por excelencia, el que más
afición genera, el tercer deporte más visto en televisión tras el futbol y el baloncesto, el más mediático y el más extendido por todo el mundo. Sin
embargo, existen otros dos deportes practicados con este equipamiento que son
muy seguidos en áreas muy localizadas del planeta: el bádminton y el pádel.
El primero de ellos es uno de los deportes más populares en Asia, en países como China, India, Malasia, Corea o Indonesia. Por su parte, el pádel es especialmente seguido en España, Argentina y Brasil. Hoy os mostramos algunas diferencias reseñables entre tenis y pádel, el hermano grande y el pequeño de los deportes de raqueta.
¿Qué herramienta necesitamos para cada modalidad?
La raqueta es el instrumento necesario para jugar al tenis, la herramienta con la que se golpea la pelota. Con una raqueta no se puede jugar al pádel, del mismo modo que con una pala de pádel tampoco se puede jugar al tenis.
La raqueta está determinada por el cordaje, y su intensidad va a determinar la capacidad de golpear la pelota en mejores condiciones. Los tenistas tienen que revisar constantemente este aspecto de su raqueta, porque un cordaje blando, que pierde intensidad, incide negativamente en el control de la bola durante el golpeo de la misma al tiempo que también influye en el control, la distancia de la empuñadura a la zona de golpeo ya que ésta es mayor que en una pala.
La pala o paleta de pádel no incluye cuerdas, sino que en el plano, que es la zona que golpea la pelota, incorpora unos agujeros que antaño se creía que mejoraban la aerodinámica de la pala, pero en realidad solo tienen función estética.
Aunque existen diferencias entre ambos modalidades, todas las marcas conviven en ambos deportes, como Head, Babolat, Wilson…
La pista de tenis es más larga pero menos ancha
Este dato sorprende a mucha gente. La pista de pádel es solo 3,77 metros más pequeña que la de tenis: 23,77 metros de larga es la pista de tenis por 20 metros de la pista de pádel. En cambio, la anchura de la superficie para jugar al pádel sí es mayor, 10 metros frente a 8,23 metros en el caso de jugar a tenis individual.
Si practicamos tenis en modalidad dobles, la anchura pasa a ser de 10,97 metros. Con respecto a las superficies, la pista de tenis admite más materiales: cemento, pista rápida, polvo de ladrillo, hierba… En el pádel, los materiales habituales para la pista son el césped artificial, la resina sintética, el cemento o el hormigón poroso.
Pelotas diferentes, ¿te sorprende?
Las pelotas de tenis y pádel son aparentemente similares. De hecho, su tamaño es el mismo o un poco más pequeña la de pádel. Sin embargo, la presión sí varía enormemente. En una pelota de tenis apta para su uso, el bote natural debe estar comprendido entre 135 y 147 centímetros, mientras que una bola de pádel la oscilación máxima es algo inferior, entre 135 y 145 centímetros. Además, a simple vista la pelota de tenis parece más ligera que la de pádel.
¿Cómo poner el juego en marcha?
Esta sí es una diferencia muy apreciable. En el tenis, el saque es un golpe ganador donde la pelota se eleva en vertical por encima de la cabeza para golpear arriba con fuerza y velocidad. Es como un remate.
En cambio, en el pádel hay que golpear la pelota por debajo de la cadera para poner en marcha el juego. En este deporte el servicio es un golpe de inicio, para comenzar la transición del punto; mientras que en el tenis puede ser un golpe definitivo. No obstante, en el tenis también se puede iniciar el juego desde abajo, aunque es algo muy inusual.
Jugar en parejas
Esta sí es otra gran diferencia. Al pádel no está permitido jugar de manera individual, siempre hay que jugar en modalidad dobles. En cambio, en el tenis lo habitual es justo lo contrario, jugar en individual, si bien el dobles es también muy interesante y para ello hay que habilitar los pasillos laterales.
Por lo general, el pádel es un deporte que anima más a la práctica inicial, es más entretenido y más accesible. En cambio, el tenis requiere de mayor destreza para resultar divertido. Además, el tenis, obliga a un mejor estado físico sobre todo en los desplazamientos, ya que la pista es más grande y si además le sumamos las zonas tras las líneas laterales y de fondo. Un ejemplo de ello pueden ser las subidas a la red ante ante una dejada con carreras de más de 11 metros de distancia y desplazamientos en la línea de fondo de esquina a esquina repetidas veces durante la disputa de un punto.
Conclusión:
Tenis, Pádel, Pickleball, Bádminton, Scuash, Tuchtennis, Tenis-Playa. Fronton-tenis, Tenis de mesa.
¡Diviértete practicando deportes de raqueta, ¡tienes mucho donde elegir!