lunes, 25 de agosto de 2025

"PADRES". DE JOSEMARI SEXMILO. Gran artículo de mi buen amigo Txema Sexmilo. Por Jorge Mir mayor





Por José María Sexmilo







PADRES

Aunque usted lo haya escuchado en ocasiones, los padres no siempre son el cáncer del deporte y de los deportistas, si bien es cierto que en ocasiones lo son, no se dan cuenta, lideran la carrera del hijo y a veces la destrozan.  Pero son los menos. En la carrera de un deportista el padre puede cobrar un protagonismo que habitualmente no merece porque, entre otras cosas, no tiene conocimientos suficientes para liderar esa línea que puede llevar al éxito o al fracaso. Es una pena que haya padres que, en el mundo del tenis, no pregunten al entrenador su opinión sobre su hijo, sobre su progresión, su futuro, sus posibilidades de éxito… en conclusión, la opinión profesional sobre el recorrido que pudiera tener en un futuro. Si esos padres fueran valientes a la hora de preguntar, y los entrenadores sinceros en el momento de responder, habría menos fracasos y más chicos con estudios.


No conozco personalmente al padre de Carlos Alcaraz, pero es un tipo que cae bien. Este personaje que siempre está en segunda fila del palco de jugadores, detrás de los técnicos, no gesticula, no grita, no se pone rojo, no le dice nada a su hijo… es como si no estuviera. Vamos, como si Carlitos fuera huérfano.


Alcaraz padre, para quien no lo sepa, es entrenador Nacional y ha sido jugador y director de Escuelas de Tenis. Es por esto por lo que no cabe en la cabeza de muchos que no participe del plan técnico/táctico de su hijo. Los que le conocen cuentan que él entregó a su chico a Juan Carlos Ferrero y su Academia de Villena hace años, y que le concedió toda la autoridad para hacer y deshacer. Eso es un padre, un buen padre de deportista. En los Congresos de Entrenadores siempre nos han dicho que el padre debe ser padre y punto. No se puede ser padre y entrenador, porque para entrenador ya está quien está. Cada uno debe trabajar su área y nada más. Pero esto que parece tan fácil, no lo es aunque parezca mentira. Hay padres que empiezan opinando y quieren acabar mandando, y eso no puede ser.


Todo en esta vida, para bien o para mal, conlleva una enseñanza. Por eso, lo ideal sería que los padres de los jóvenes tenistas aprendieran la lección que nos da en cada partido de su hijo Carlos Alcaraz padre. Sí, ya sé que no es fácil, que a muchos les gustaría gritar, gesticular, quejarse al juez de silla, insultar al contrario y, en fin, llevar a cabo esas conductas que para nuestra desgracia son bastante habituales en los niveles medios. Pero eso no puede ser, porque el padre que no es capaz de estar viendo a su hijo sin ser protagonista, debería abandonar la grada,  ir al bar del club y leerse el periódico con un descafeinado mientras el hijo acaba su partido. Y que la gente que le vea al chico, mire a su alrededor y piense que el pobre no tiene a nadie a quien recurrir.  Vamos, como Carlitos. Como si fuera huérfano.





JOSEMARI SEXMILO

Entrenador Nacional de Tenis

Publicado en Diario de Noticias de Navarra (16.AGO.2025)


2009-2017, "LA ÉPOCA DORADA DEL TENIS MALAGUEÑO", ¿DAVIDOVICH?. Álbum de tenistas malagueños.