Rafa Nadal
no estará en la final del Mutua Madrid Open, la primera sin protagonista del
‘Big Four’ once años después, pero sí dos tenistas de mucha entidad, presente y
futuro del tenis mundial. El alemán Alexander Zverev, 21 años y nº 3 mundial,
se ha citado con el austríaco Dominic Thiem, 24 y nº 7, este domingo a las
18.30 horas en el Estadio Manolo Santana de la Caja Mágica.
Thiem ,
vergugo de Nadal, destronándolo en el torneo y también devolviéndole el nº 1
indirectamente a Roger Federer, repitió presencia en la final derrotando al
sudafricano Kevin Anderson por 6-4 y 6-2 en 1h.25’. Zverev tuvo que esperar a
las diez de la noche para afrontar a Denis Shapovalov, pero subsanó el desfase
horario respecto a su próximo adversario dando un repaso al canadiense.
Enfrentamiento
‘Next Gen’ descafeinado. Alexander Zverev enseñó sus galones actuales
arrollando 6-4 y 6-1 en 57 minutos al zurdo Shapovalov, 43º ATP. Está fuerte el
teutón, que la semana pasada triunfó en Múnich y que también tiene en su zurrón
los Masters 1000 de Canadá y Roma 2017. Palabras mayores ante un rival que lo
será más en unos meses, todavía ‘tierno’.
Shapovalov
llegó justo a la cita con Zverev, inconscientemente satisfecho de unas ‘semis’
en tierra, que por ahora no había sido su terreno. El choque se decidió a
partir del 4-3. Sascha encadenó siete juegos consecutivos, el norteamericano se
vino abajo cuando cedió su saque a la primera ocasión.
Enfrente los
dos tenistas con más partidos ganados este curso: Zverev, 25-7 y Thiem, 25-6.
El germano ha mantenido intacto su saque durante el torneo, remontando una
única bola de rotura ante Leo Mayer. El austríaco tiene la experiencia de la
final de 2017 cedida a Rafa Nadal.
Quinto duelo
entre ambos, con 4-1 Thiem, 2-0 en tierra. El antecedente más reciente data del
‘indoor’ de Rotterdam 2017, con 3-6, 6-3 y 6-4 de Dominic.
Thiem, a por
una décima corona, segunda del ejercicio después de Buenos Aires. Zverev, a por
una octava, encadenarla con la de Múnich. Uno y otro han enseñado un gran
tenis, mucha confianza, durante la semana. Una clausura que promete mucho.