El serbio se medirá a Tsitsipas en la final del domingo
Novak Djokovic buscará el domingo ganar su décimo título del
Abierto de Australia, lo que además le permitiría empatar el récord histórico
de trofeos grandes de Rafael Nadal (22) y recuperar el No. 1 del Pepperstone
ATP Rankings. Este viernes, el serbio derrotó 7-5, 6-1, 6-2 a Tommy Paul y se
citó con Stefanos Tsitsipas en el encuentro decisivo en Melbourne.
Sin embargo, será una final con muchísimo en juego: si el griego gana, conseguirá su primer Grand Slam y también ascenderá al No. 1 del Pepperstone ATP Rankings. Es decir, el ganador será el nuevo dueño de la clasificación desde el próximo lunes, reemplazando a Carlos Alcaraz.
"Por supuesto que [tiene un significado añadido]", dijo Djokovic cuando se le preguntó sobre la pelea por el No. 1 del mundo. "Ganar Grand Slams y ser el número 1 del mundo son probablemente los dos objetivos más grandes a los que puedes aspirar como tenista profesional. Veamos qué sucede”.
"Tuve mucha suerte de mantener los nervios hacia el final del primer set", dijo Djokovic. "Fue clave. Después de eso, comencé a mover más la pelota, así que estoy muy contento de llegar a otra final”.
Al derrotar a Paul en su primer enfrentamiento ATP Head2Head, Djokovic se garantizó disputar su final de Grand Slam 33, en la que tendrá al otro lado de la red a un rival conocido: el serbio ha ganado a Tsitsipas en 10 de los 12 duelos entre ambos.
Djokovic se colocó con una ventaja de 5-1 en el primer set, pero vio cómo Paul le daba la vuelta al marcador, recuperando las dos roturas de diferencia, para colocar el 5-5, obligando al serbio a aumentar el nivel para terminar haciéndose con la primera manga, evitando el desempate.
Tras amarrar el primer set, Djokovic se desató, arrancando el segundo con un parcial de 5-0 a lomos de su mejor versión, provocando los aplausos en las gradas de la Rod Laver Arena por un público entregado al máximo ganador en la historia del primer Grand Slam de la temporada.
Por ese camino siguió el serbio en el tercer parcial, que coronó sin problemas para meterse en la gran final del Abierto de Australia.
La victoria del viernes extendió la racha ganadora de Djokovic en el Abierto de Australia a 27 partidos. Después de otra exhibición dominante, el jugador de 35 años reiteró cuánto disfrutó del apoyo de los fans en la Rod Laver Arena, donde levantó por primera vez el trofeo del Abierto de Australia en 2008.
"Significa todo, especialmente en esta etapa de mi carrera", dijo Djokovic. "Necesito ese motor, necesito esa energía y estoy muy agradecido porque todavía tengo suficiente gasolina en las piernas para poder jugar a este nivel en una de las pistas de tenis más grandes del mundo”.
Paul será recompensado por alcanzar su primera semifinal de Grand Slam esta quincena en Melbourne con una plaza en el Top 20 del Pepperstone ATP Rankings por primera vez.